Hola, mi nombre es Florencia, y quiero contarles un poquito de mi historia…

Desde que era muy pequeña compartí mucho tiempo con mis tías abuelas a quienes quise profundamente. A pesar de que crecí en un hogar lleno de amor con mi mamá, papá y hermanas, ellas desempeñaron un papel fundamental en mi vida, estableciendo un vínculo especial.

Aunque ellas ya no están aquí, conservo los más lindos recuerdos, como esas largas charlas y tejidos… Las tardes de invierno con el mate y las agujas eran siempre de los mejores planes.

Con ellas aprendí a tejer con dos agujas y comencé a realizar mis propias bufandas, gorros y bolsitos.

Al crecer, me empezó a interesar el crochet (que se realiza con una sola aguja) y tras pasar hasta más de 5 horas sentada en el sillón, básicamente en la misma posición, viendo series y tejiendo sin darme cuenta del tiempo, entendí que eso realmente era lo que más amaba hacer….

Comencé a tejer regalitos para mis amigas que estaban por ser mamás, porque quería que ese momento tan especial del nacimiento se reflejara en algo hecho con todo el amor y dedicación que para mí representaban esos tejidos.

Aunque soy Contadora de formación, habiéndome graduado y ejerciendo también como docente, siempre sentí una gran pasión por el tejido, especialmente cuando se trata de prendas y detalles para bebés.

“Que tus sueños te lleven allí donde tu corazón es feliz”, es una de mis frases favoritas… y como me caracterizo por ser una persona que jamás se rinde, muy perseverante y dispuesta a luchar por alcanzar lo que me propongo, en el año 2020, (durante la pandemia) con impulso de mis amigas y familia, nace Lirio tejidos by flor con el propósito de trasmitir amor a través de mis creaciones.

Las manos tienen el poder de crear, acariciar, sanar y de tejer amor. Por eso mi objetivo es poder acompañarlos y estar presente en las fechas especiales de vuestros bebés y crear recuerdos felices que atesoren para siempre.

Me considero una persona muy exigente y minuciosa con lo que hago, hasta el punto de no importarme cuántas veces deba repetir un trabajo. Si no logro el resultado que busco, lo hago y deshago tantas veces como sea necesario hasta conseguirlo (mis hermanas y mi papá pueden dar fe de esto jaja). Aprendí a llevar mi paciencia al límite, y eso me permitió darme cuenta de la paz que me transmite hacer lo que tanto disfruto.